Almohada Fibra Termoreguladora Cool Belnou

Tan bajo como 27,00 € Regular Price 33,70 €
Disponible
Sólo queda %1
Codigo
almohada-termoreguladora-cool-belnou

LA ALMOHADA FIBRA TERMOREGULADORA COOL DE BELNOU está fabricada con hilo termoregulador, a diferencia de los tejidos termoreguladores por impregnación, el tejido Belnou nunca pierde sus propiedades después de los lavados.

Este producto está incluido en el PACK TERMOREGULADOR COOL DE BELNOU y se puede comprar a un precio AHORRO ESPECIAL.

Más Información
Firmeza Firmeza Media
Nucleo Fibra
Tejido Cool
Marca BELNOU
Fabricante BELNOU

Como comprar Almohada fria Cool Belnou

Para comprar Almohada fria Cool Belnou en areaconfort

Tiene que seleccionar el producto Almohada fria Cool Belnou, y seleccionar las opciones como talla, color o complementos que necesite, y añadirlo al carrito de compra.

Puede comprar Almohada fria Cool Belnou de fabricacion Española.

Por diferentes medidas o Colores.

·         Almohada reversible con interior de fibra hueca siliconada que no se deforma con el uso. Si eres de las personas que sudan en la cama y te cuesta conciliar el sueño sin duda esta es tu almohada.

 

·         Incorpora el Tejido exterior patentado "Cool" que es termoregulable y que disipa el calor y refresca la piel del rostro de forma notable, para un descanso óptimo. NO pierde sus propiedades ni por los lavados ni por su uso continuado.

 

·         Las almohadas se venden con las fundas incorporadas, aunque también puedes adquirir por separado la funda con tejido "Cool" y colocarla en tu almohada habitual. Es un producto polivalente ya que tanto almohadas como fundas son REVERSIBLES y tienen una cara de Invierno más cálida, la podrás utilizar todo el año.

 

·         ATENCIÓN. También tenemos a la venta el "Cubrecolchón Cool Belnou" con el mismo tejido Anti calor para notar la frescor de este innovador tejido por todo el cuerpo.

 

·         Tejido que evita la aparición de Mohos y Bacterias de todo tipo ya que posee un acabado Antiácaros Sanitized Científicamente Probado.

 

PEHD (fibra Cooltech de tecnología japonesa basada en la alta conductividad térmica y disipación del calor). Gracias a esta excelente combinación, obtenemos un tejido frío que actúa, además, como un gestor excelente de la humedad y la temperatura, ideal para las personas que tengan tendencia a sentir calor al dormir.

Se trata de un tejido con la capacidad de transmitir al cuerpo la sensación de frescor permanente que recoge de la temperatura ambiente manteniéndose entre 10-12 grados por debajo de nuestra temperatura corporal, ahorrando en aire acondicionado. Las propiedades del tejido COOLTECH no son ningún tratamiento añadido sino del tipo de hilo con el que está confeccionado, por lo que permanecerán inalterables durante toda la vida del producto, independientemente de los lavados que se le realicen.

El efecto que este material transmite a nuestro cuerpo es perfectamente aplicable a los meses de invierno, ya que las mantas y edredones que utilizamos durante ese periodo del año aportarán el calor necesario para que el tejido conserve dicha temperatura.

Más frío: de 10 a 12 grados por debajo de nuestra temperatura corporal

Más seco: No se pega, ni satura.
Más saludable: Libre de químicos.
Más tiempo: Cero desgaste con el tiempo.

CARACTERISTICAS DE LA ALMOHADA FRIA COOL DE BELNOU:
- Hilo Termoregulador
- No pierde sus propiedades con el lavado
- Descanso sin calor
- Tecnología Japonesa.
COLOR:  blanco
ANCHO: 40 cm.
LARGOS: 70 75 80 90 105 120 135 150 cm.


Fibra hueca Fibra hueca: Fibra hueca de un solo canal: El canal de la fibra hueca permite la circulación constante del aire, facilitando así la evaporación de la humedad. Las características que convierten a la fibra hueca en la mejor fibra es que conforma un tejido muy higiénico y transpirable que evita la acumulación de malos olores y le da propiedades antialérgicas. Asimismo, es muy ligera pero voluminosa, suave, esponjosa y tiene una gran capacidad de recuperación, es decir, vuelve a su forma inicial una vez se elimina la presión de la cabeza.


Fibra hueca siliconada Fibra hueca siliconada: Fibra original (virgen), ya sea natural o artificial, con forma de tubo y recubierta de silicona para un mejor deslizamiento y una pronta recuperación del material tras las deformaciones que se le aplican.


Sanitized Sanitized®: Este tratamiento se aplica sobre la superficie del tejido para crear una barrera antiácaros, antibacterias y antihongos muy efectiva. Un plus de protección para los complementos de descanso.


El Algodón El algodón: Hace más de 7.000 años ya se cultivaba el algodón en Egipto, India y Perú. Y es que el algodón es la fibra natural más valorada y se utiliza desde la antigüedad para crear todo tipo de tejidos. La planta del algodón se cultiva en zonas cálidas y templadas con tierras ricas y bien trenadas. Tras la caída de la flor, el capullo del algodón madura y se transforma en una bola oval o copo, que al abrirse deja al descubierto las fibras de algodón. Cada copo puede tener hasta 20.000 fibras y de su longitud y brillo depende la calidad del algodón. El algodón, se compone en un 94% de celulosa, que se deposita en él durante su maduración, dándole así su estructura cristalina y consistencia definitiva. Al secarse, las fibras se enredan entre sí de forma natural. Es en este momento cuando se recoge, para pasar después al proceso de hilatura. El resultado, es la obtención de un producto natural, resistente y con una gran capacidad de absorción, pero que además es transpirable y tiene un tacto suave y agradable. Por todo esto, el algodón proporciona una profunda sensación de frescor cuando se utiliza en la ropa de cama.


Cómo cuidar mi almohada ¿Cómo cuidar mi almohada? Si la almohada dispone de doble funda, es aconsejable lavarla conjuntamente para que el relleno quede más protegido. Utilizar el programa de lavadora para prendas delicadas a baja temperatura con detergente líquido suave. No utilizar suavizantes. Almohadas de plumas: Introducir dentro de la lavadora dos pelotas de tenis envueltas y atadas con medias. Almohadas de fibra o látex: Enrollar la almohada y sujetarla con una cuerda o hilo para evitar que se desenrolle. Introducir la almohada en el mismo sentido en el que gire el tambor. Para evitar que las almohadas choquen demasiado contra el tambor de la lavadora, lavar más de una almohada en cada lavado. Realizar un segundo aclarado para evitar que permanezca cualquier residuo de detergente en el interior de la almohada. Secar la almohada en la secadora o al aire libre: Secadora: Utilizar un programa de ciclo de secado en frío. Si fuese necesario más de un ciclo, sacar la almohada y ahuecarla antes de introducirla de nuevo (para las almohadas de duvet, introducir en la secadora dos pelotas de tenis envueltas y atadas con medias). Aire libre: Colocar la almohada en un lugar totalmente horizontal y ahuecarla una vez seca.


¿Cómo aliviar el dolor de cuello? ¿Cómo aliviar el dolor de cuello? Los expertos nos lo explican a partir de las siguientes medidas: No permanecer en una misma posición durante muchas horas: aunque es difícil corregir las malas posturas, levantarse de vez en cuando y cambiar de posición es clave para evitar que el cuello se agarrote y provoque molestias con el paso de las horas. Realizar ajustes ergonómicos: en caso de utilizar el ordenador continuamente, sitúa el monitor a la altura de los ojos para poder verlo con facilidad y no forzar los movimientos. También al consultar tabletas, es preciso colocarlas sobre una almohada para que puedan reposar en un ángulo de 45 grados, en vez de apoyarlo sobre el regazo. Conoce tus límites: antes de realizar movimientos que requieren esfuerzo – como mover muebles u otros objetos pesados – pide ayuda y tu cuello y espalda lo agradecerán. Duerme las horas que necesites: los problemas de sueño aumentan el riesgo de padecer dolores musculo-esqueléticos. Intenta dormir las horas necesarias y descansar en el ambiente adecuado: sin distracciones, sin ruido, sin móviles, sin televisión, sin demasiada luz, etc. Desde Velfont añadimos otra medida tan o más esencial que las ya mencionadas: dar con la almohada ideal para cada uno. Es importante destacar que la almohada ideal para cada persona es aquélla que permite que cabeza, cuello y espalda (es decir, toda la columna vertebral) estén alineados en la misma posición que lo están cuando estamos de pie. Es por eso que no existe una almohada ideal para todos sino que cada uno debemos encontrar aquélla que mejor encaje con nuestras preferencias, constitución y posición a la hora de dormir.


Reemplazar la almohada ¿Cuándo debo reemplazar mi almohada? Según los expertos en descanso, lo ideal sería reemplazar nuestra almohada en un periodo de entre seis meses y dos años como máximo. Cuando se trata de cambiarla, es importante recordar que la almohada ideal debe rellenar el hueco entre la cabeza y los hombros, para así evitar dolores de espalda y demás daños físicos totalmente innecesarios. En primer lugar y aunque no seamos directamente conscientes de ello, con el paso del tiempo las propiedades de nuestra almohada pueden perder efectividad y calidad. De hecho, cuando llevamos tiempo utilizando la misma, deja de aportarnos la comodidad del principio y, de rebote, daña progresivamente nuestra espalda. En segundo lugar, la almohada podría ser una cuna de ácaros, polvo y suciedad. Aunque puede lavarse, la efectividad de la limpieza no es tal como cambiarla. Para evitar compartir cama con estos pequeños seres vivos, es mejor reemplazar la almohada frecuentemente. Y, en tercer lugar, con el paso del tiempo, nuestra almohada se empapa de sudor, grasa e incluso células muertas de nuestra piel que, aunque nos parezca extraño, pueden provocar acné y demás imperfecciones.


Las almohadas se pueden lavar ¿Las almohadas se pueden lavar? Aunque no es necesario hacerlo tan a menudo como con las fundas, las almohadas pueden (y deberían) lavarse una o dos veces al año para para eliminar los ácaros, hongos y bacterias que van acumulándose en ellas. No debemos olvidar que pasamos, de media, entre siete y ocho horas al día respirando sobre la almohada, cosa que la convierte en el cultivo ideal para que hongos, ácaros y algunas bacterias vayan creando en ella su propio ecosistema. Por norma general, se recomienda evitar lavar en casa las almohadas de plumas, viscoelásticas y látex puesto que necesitan secarse muy bien eliminando totalmente cualquier tipo de humedad que pueda quedar en su interior. Por otro lado, las almohadas de fibra pueden lavarse sin problema en la lavadora. Se recomienda lavarlas con agua caliente para acabar con los microorganismos y con una pequeña dosis de detergente y suavizante. Para que la almohada se ahueque durante el lavado, se recomienda, además, introducir en el tambor una o dos pelotas de tenis que irán moviendo su contenido a medida que avance el programa de lavado. Cuando esté limpia, no se debe escurrir ni retorcer. Para que se seque bien, primero hay que aplastar la almohada ligeramente en una superficie lisa y limpia (como por ejemplo una bañera) y luego pasarle una toalla seca para retirar la mayor humedad posible. También se puede dejar la almohada en una superficie lisa, sobre un par de toallas, dándole la vuelta de vez en cuando para evitar que la humedad se acumule por una sola cara. A continuación, se puede dejar secar al aire o introducirla en la secadora. Si somos reacios a meter la almohada en la lavadora, también se puede obtener un buen resultado lavándola a mano, aunque para ello sea necesario invertir un poco más de tiempo y esfuerzo. En cualquier caso, y si no estamos seguros del lavado que podemos realizar, siempre nos quedará la opción de llevar nuestra almohada a la lavandería, pues ellos mejor que nadie sabrán el cuidado que se deberá que darle.


La firmeza de las almohadas La firmeza de las almohadas: A la hora de escoger la almohada ideal, además de tener en cuenta el tejido de confección y el material del relleno, es importante considerar qué tipo de firmeza queremos, o más bien, necesitamos. Las almohadas se pueden clasificar según su firmeza en: almohadas bajas, medias y altas. Para elegir una almohada adecuadamente, la regla general es la misma que se aplica para elegir el colchón: aquélla que nos resulte más cómoda y nos ayude a mantener la columna vertebral en una postura correcta y natural. La elección de un grado u otro de firmeza de la almohada no debe ser aleatoria sino que estará directamente relacionada con nuestra complexión física y con nuestra posición más habitual al dormir. Por lo tanto, lo primero que hay que determinar, una vez considerado nuestro grado de corpulencia, es cuál es esta posición más habitual. Para identificarla, sólo hay que pensar en cuál es la postura en la que nos encontramos la mayoría de las veces al despertar: de lado, boca arriba o boca abajo. En función de la respuesta, tendremos un punto de partida para escoger nuestra almohada ideal. Si dormimos de lado, la almohada que usemos deberá permitir que el cuello quede en horizontal y alineado con la columna vertebral; ni más alto ni más bajo. Será necesaria, pues, una almohada gruesa y de firmeza alta para equilibrarse con la anchura del hombro. Si dormimos boca arriba, necesitaremos una almohada de firmeza media, que se adapte a la curva natural del cuello; ni muy gruesa ni muy fina para que las vértebras cervicales no adquieran una postura forzada o antinatural. Si se da el caso que dormimos la mayoría del tiempo boca abajo, deberemos escoger una almohada de firmeza baja para que la cabeza y el cuello queden girados en una postura natural, cómoda y no perjudicial. Para los inquietos que se mueven mucho y cambian de posición durante la noche, la almohada de firmeza media será la más indicada.


LA ALMOHADA IDEAL:

Si durante su descanso o al levantarse tiene dolor de cuello o espalda, posiblemente su almohada no es la más adecuada para su fisonomía y debería cambiarla.
 
Según afirma José Ignacio Normand, jefe de servicio de Traumatología del Hospital Sonsoles (Ávila) en un artículo publicado en el diario el País de fecha 03 AGO 2014. "La complexión física o la postura preferida para dormir determinan qué tipo de almohada es la más adecuada para cada persona. Se trata de que, al acostarnos, la columna vertebral quede recta, como cuando permanecemos de pie. Es decir, que desde el comienzo de las cervicales al final de la espalda, esté alineada.”
 
Para encontrar la almohada más conveniente y adecuada a nuestra forma de dormir así como a nuestra complexión, según afirma en un artículo publicado en el diario el País de fecha 03 AGO 2014, Francisco J. Márquez Dorsch, jefe de servicio de Otorrinolaringología del Hospital Sanitas La Moraleja (Madrid), “La primera norma es que es recomendable dormir siempre con almohada, sujeta la cabeza y favorece que adoptemos una posición natural en la que nuestra musculatura se encuentre relajada”; "dormir sin almohada haría que el cuello estuviera inclinado forzando una postura antinatural durante muchas horas ", la almohada que usamos afecta directamente a nuestras cervicales y espalda "En la zona del cuello", argumenta Márquez, "hay múltiples articulaciones, ligamentos y músculos en los que se acumulan tensiones durante el día; para que estas estructuras se relajen durante las ocho horas de sueño, deben permanecer en una posición cómoda".
Los factores que deben influir en nuestra elección de la almohada más adecuada son su firmeza y su altura.
 

LAS ALMOHADAS SEGÚN SUS MATERIALES:

Almohadas de fibra: Son enteramente lavables lo cual favorecen su higiene además tienen una gran capacidad de recuperación por lo que son generalmente muy cómodas, además aportan una gran transpiración y frescor gracias a la circulación del aire en su interior, lo que favorece la absorción de la humedad.
 
Almohadas de Viscoelástica: Son termo sensibles lo que le dan mayor adaptación al ajustarse perfectamente a la forma de nuestra cabeza, lo que nos proporciona el mejor soporte y favorece la adaptación de nuestras cervicales.
 
Almohadas de Látex: El látex es un producto natural que le confiere una estructura interna de poros abiertos, lo que le confiere una mayor ventilación favoreciendo un mayor higiene.
 

 
LAS ALMOHADAS SEGÚN LA POSTURA AL DORMIR:
La posición que adoptamos en nuestro descanso, determina la almohada más adecuada a nuestra postura corporal:
 
Si dormimos de lado:
Una almohada alta y dura levantaría nuestro cuello lo cual nos llevaría a una postura demasiado forzada y poco natural, por otra parte con una demasiado blanda y baja haría que el cuello cayese perdiendo la alineación adecuada con el resto del cuerpo. Según afirma en el artículo publicado en el diario el País de fecha 03 AGO 2014, Francisco J. Márquez Dorsch, jefe de servicio de Otorrinolaringología del Hospital Sanitas La Moraleja (Madrid), la fórmula matemática para elegir los centímetros de grosor que debe tener la almohada Ideal: "Basta con medir la distancia que va desde el extremo del hombro a la cara". Se puede hacer colocándose de pie con un hombro apoyado contra la pared y midiendo la distancia que queda de la pared a la oreja; al resultado se suman entre dos y cuatro centímetros dependiendo de la dureza de la almohada"". En definitiva, alguien con hombros anchos necesitará una almohada más gruesa que otra persona de hombros más estrechos.
 
Si cambiamos mucho de postura:
Para dormir con cambios frecuentes de postura, lo recomendable es una almohada de altura y firmeza media.
 
Si dormimos boca abajo:
Por lo general es recomendable una almohada baja y blanda que nos ayude a adoptar una postura en la cual la cabeza quede alineada con nuestro cuerpo de forma natural, igual que al estar de pie.
 
Si dormimos boca arriba:
Para un descanso boca arriba, una almohada de firmeza y altura intermedia es la más recomendable.
 
Para los niños pequeños:
Según afirma en el artículo publicado en el diario el País de fecha 03 AGO 2014, Francisco J. Márquez Dorsch, jefe de servicio de Otorrinolaringología del Hospital Sanitas La Moraleja (Madrid), ""Los bebés tienen la cabeza más grande en proporción al cuerpo que los adultos"", por eso, al dormir, su cabeza queda alineada con el cuerpo y no necesitan usar almohada. ""Podría ser recomendable que la utilizaran a partir del año de vida y debería ser pequeña, mullida y de material hipo alergénico"".
 
Para los que roncan:
Según recomienda en el artículo publicado en el diario el País de fecha 03 AGO 2014 la doctora Clara Beltrán, especialista en Otorrinolaringología y en Medicina Subacuática e Hiperbárica, la mejor posición para descansar y evitar dolores de espalda y problemas respiratorios (como la apnea o los ronquidos), ""es la de cubito lateral o fetal"", dormir de lado y con la columna recta. El Síndrome de Apnea Obstructiva se produce, explica Márquez, ""por un cierre de la vía respiratoria motivada por la relajación muscular durante el sueño (la vía respiratoria se obstruye especialmente, a nivel del paladar y de la base de la lengua)"". Pero existen casos en los que solo aparecen apneas en una posición –apneas posturales–, ""sobre todo boca arriba"", matiza Beltrán, ""con lo que se debe intentar evitar que estos pacientes duerman es esa posición. Si dormimos boca arriba, una almohada demasiado alta no favorece la respiración, ya que nos hace flexionar la cabeza hacia adelante y obstruye las vías respiratorias"". Para ellos, apunta Márquez, ""existen almohadas especialmente diseñadas, que obligan a quien las usa a adoptar una postura de lado y evitar con ello el cierre de la vía respiratoria"".
 
Para dormir en pareja:
Debido a la existencia por lo general de diferencias en el peso o estatura, cada persona debería contar con la almohada más adecuada a su complexión y forma de dormir.

En la Unión Europea, el consentimiento para el uso de cookies es obligatorio conforme al Reglamento General de Protección de Datos (GDPR). Esto significa que, al acceder a un sitio web como usuario individual, se debe otorgar el consentimiento explícito para el uso de cookies, ya sea mediante una ventana emergente o un banner en la página. Las cookies son pequeños archivos de texto que se almacenan en el dispositivo del usuario y se usan para el seguimiento de los visitantes y son necesarios para el correcto funcionamiento del sitio Web y el servicio de la mejor experiencia de usuario. El consentimiento del usuario es fundamental en la protección de la privacidad en línea y en el control de sus datos personales, no se comparte ningún dato con terceros.